viernes, 23 de diciembre de 2011

Noches de lluvia, días de cambio de planes


La lluvia nos cogió en medio del cronograma de filmaciones.  Lo grave de esto fue que para poder coordinar un día de filmación, sobre todo con los hombres y las mujeres, era muy difícil que sus horarios independientes coincidan.  Esto ocasionó un retraso casi de 1 semana para las siguientes actividades con ellos.

Ya no podíamos posponer más lo planeado y, con lluvia o sin ella, llevaríamos a cabo el nuevo cronograma de filmaciones que establecimos.  Cada equipo tenía sus historias desarrolladas y plasmadas en storyboards.

En el caso de las mujeres, la historia que decidieron contar está llena de nostalgia, sentimiento y sensaciones pasadas que Ricardo Palma les inspiraba cuando recién llegaron a establecerse en ese lugar.  El grupo estuvo conformado por 5 señoras entre las cuales el grupo base fue de doñas Zoili, Karina, Milena,y Tulia.  Cada una de ellas tenía un tiempo distinto de establecida en el caserío.  Todo comenzó con la idea de Doña Tulia, ella quería contar todo lo que veía y le impactó del bosque que había en lugar de la actual plaza del pueblo.  Luego todas las demás comenzaron a recordar sonidos de tiempos pasados, cuando para recoger agua debían caminar y caminar, y cuando todas las casas que hay ahora en Ricardo Palma no eran más que árboles tupidos.  Así es como decidieron filmar sus historias comparadas con la realidad de la biodiversidad en el pueblo. 




Para los hombres desde un inicio estuvo clara su locación: Shitariyacu.  Éste es el lugar de Concesión para Conservación de la Asociación de Desarrollo Sostenible y Conservación Ricardo Palma, y ellos no querían dejar pasar esta oportunidad de filmar y mostrar a todos los que vean su película, los atributos del lugar.  Por cierto, la resolución de la concesión está actualmente publicada en el diario El Peruano y solo queda esperar los 30 días hábiles para descartar cualquier objeción.

Con ellos el mayor problema fue el clima; con lluvia tan fuerte como había estado cayendo no podríamos llegar al lugar que ellos indicaban y mucho menos sacar las cámaras para filmar.  Pero, felizmente, llegó una mañana de claridad, con poco sol, y despejado indicando que por lo menos tendríamos unas horas sin lluvia.  Así que lo aprovechamos sin pensarlo, y salimos rumbo a Shitariyacu.  El grupo de hombres estaba conformado de alrededor de 6 en el equipo base, pero fueron aumentando en algunas sesiones y disminuyendo en otras.  Para la filmación fueron los señores: Batmer, Miguel, Ronald, Aurelio, Manuel, y Litman.  Ellos habían determinado desde un inicio que su película sería un documental sobre la zona de concesión con hincapié en la biodiversidad que se puede encontrar.




Lo que más me va gustado de esta experiencia, es que cada grupo tiene ideas muy diferentes, pero todos están ligados al mismo objetivo: conservar.  Tienen muchas historias que contar y lo quieren hacer.  Pensar en imágenes es lo que facilita la transmisión del conocimiento desde sus autores o primeros receptores, hacia los que jamás tuvieron experiencias parecidas o tal vez sí, formándose un intercambio implícito.  El diálogo se vuelve horizontal y sin restricciones de tiempo y espacio, cada cual coge su cámara y lo muestra, tal cual.  Puede teletransportar a sus espectadores al momento preciso donde todas las sensaciones originales pueden ser invocadas unas y otra vez.  Y también puede llevar a los espectadores a lugares llenos de vida natural que sus pies aun no visitan.

1 comentario:

  1. Felicitaciones Karla!! Veo que al final has logrado hacer que cada uno de tus intereses encaje en un solo tipo de actividad.

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